Los puertos de America del Sur empiezan a sentir el impacto del Covid-19 y multinacionales como la Maersk y DP World suman más presión de carga horaria, cuando debería ser lo inverso, cuida a su gente pero “negocio manda”.
La voracidad de la multinacional más poderosa del mundo, no es novedad. Su política de hostigamiento laboral y persecución sindical tampoco. Notitrans realizó ya distintas notas sobre sus operaciones en la región. Por estos días hay denuncias graves en Perú, Argentina y Colombia.
En Peru Norberto Farfan líder del Sutramporpc en el puerto del Callao denunció a APM Terminals por impulsar jornadas de 12 horas en medio de la pandemia con casos positivos ente los portuarios. La mecánica es aumentar la carga horaria , bajo el pretexto de “cuidar a los trabajadores”, lo que se esconde es que en muchos casos se computa a los parados como vacaciones pagas. “Aunque la verdadera bomba de tiempo es que el agotamiento, hace que el sistema inmunológico se resienta. Todo por el bien del negocio”, sostuvo Farfan.
En Colombia la Maersk tuvo ayer un fuerte revés sindical que le dobló el brazo. Como forma de domesticación intentó despedir un trabajador en las operaciones de Tcbuen en Buenaventura por reclamar protección sanitaria por el Covid-19.
La rápida acción del sindicato de transporte SNTT con denuncia internacional incluida, logró frenar el despido. “Los sindicatos de la región tenemos que frenar a la Maersk, lo que nos hicieron a nosotros es su nueva política laboral. No les importan nuestras vidas sino el negocio. Tenemos que unirnos en solidaridad”, declaró el líder gremial, Esteban Barbosa, a Notitrans.En Argentina APM apuesta a lo que mejor sabe hacer: el Lobby. Presiona sobre los estados para convertirse en operadora monopólica, recursos no les falta. El puerto de Buenos Aires está en plena transformación y casi está logrando sacar del juego a DP World, -Terminales Río de la Plata- que resisten denunciando en el marco de la ley antimonopolio. En el medio están los trabajadores que con sus sindicatos resisten para evitar una ola de despidos.
La ITF en alerta
La Federación Internacional de Trabajadores del Transporte (ITF) mantiene su sede Regional para las Américas de Río de Janeiro en alerta por el coronavirus. “Solo la unidad de los trabajadores como vimos en Colombia puede frenar los atropellos empresarios”, sostienen.
El portuario argentino Roberto Coria presidente del Comité Regional de ITF y Secretario General del sindicato de Guincheros, fue quien salió al cruce del escenario que se empieza a desplegar. “Hemos solicitado al Gobierno de Perú una urgente respuesta, ante la situación denunciada por los trabajadores de la empresa DP World y APM en el Puerto del Callao, como así también solicitamos que se tomen las medidas y los protocolos necesarios, mas allá del poderío de las empresas, a fin de resguardar la salud, la seguridad y la vida de los trabajadores portuarios”.